Alfonso Rueda desde un multitudinario mitin en Pontevedra: «O noso modelo é o que funciona, non vou meter a Galicia en camiños sen saída»

Xosé Vázquez Gago
Xosé Gago PONTEVEDRA

ELECCIONES GALLEGAS 18F

En una abarrotada plaza de toros de Pontevedra, el candidato del PPdeG defiende una Galicia «sen divisións» tras recibir el apoyo de Rajoy y Feijoo

03 feb 2024 . Actualizado a las 21:50 h.

Aunque se repita al menos cada cuatro años, la imagen de la plaza de toros de Pontevedra rebosante de banderas del PPdeG no debe resultar menos desalentadora para la oposición. Hoy sábado se repitió la foto, prueba de que la temida maquinaria electoral popular está a pleno rendimiento. «Nesta praza un entra de candidato e sae de presidente da Xunta», dijo Alberto Núñez Feijoo a Alfonso Rueda. «A presidente do Goberno de España se tarda un pouco máis», añadió, refiriéndose a Mariano Rajoy y, con retranca, a sí mismo.

Los tres presidentes se sucedieron tras el atril. Rajoy arrancó con estilo característico. «Dejaron de gobernar, siguen a la espera y lo que les queda», dijo sobre la derrota del PSdeG y el BNG en el 2009. Rajoy reivindicó la victoria del PP en las pasadas generales de julio, y advirtió que «un gobierno Frankenstein nos impidió gobernar». «No se puede repetir ni en España ni en Galicia, porque esto no va a acabar bien, al tiempo». Pidió el voto para Alfonso Rueda por su preparación, experiencia y porque «es sensato y, visto como está el patio de la política española, eso es un valor importante». También para que no gobiernen Galicia los del indulto, el 155 y la amnistía de los independentistas, que denostó como un «ataque a la democracia».

Alberto Núñez Feijoo atribuyó la decisión de mitinear en la plaza de toros ya en el 2009 al propio Rueda, empeñado en que «podíamos encher» pese a estar en la oposición, y retó a sus oponentes: «Xa que agora copian as campañas do PP, que enchan esta praza».

«Aquí estamos a que ningún gallego sea menos que un independentista», proclamó Feijoo, que usó gallego y castellano durante su mitin. El presidente nacional del PP describió a Rueda como «la respuesta de Galicia» que no quieren oír ni Pedro Sánchez ni un nacionalismo «que quiere hacer lo que hacen Bildu y ERC». Remató pidiendo el voto para Rueda a todos los que confiaron en él, porque tiene «máis experiencia» en la Xunta que la que él tenía cuando ganó en el 2009, y también el de todos los que votaron a Pedro Sánchez, a quienes el líder del PSOE «engañó».

También Alfonso Rueda arrancó refiriéndose a la plaza y a anteriores mítines: «No 2024 tamén enchemos, máis que nunca, e gañaremos as eleccións», vaticinó. «O noso modelo é o que temos, o que nos gusta e o que funciona» reivindicó el candidato del PPdeG, que advirtió contra la importación de «modelos de fora que están crispando España». «Non vou meter a Galicia en camiños sen saída. Non vos quero fallar, e para iso pido esa enorme confianza», enfatizó reclamando la mayoría absoluta que su partido necesita para gobernar porque no hay socio posible en Galicia.

Su proyecto es una comunidad «sin divisións e sen muros. Somos xente amable e xente riquiña, non somos xente de muros». Afirmó que no iba a «perder o tempo falando dos demais», y casi cumplió, porque sí lanzó algunos dardos a sus rivales. Los de Sumar, «que solo queren cargos», el PSdeG, «o máis servil e ó máis ''sí bwana'' de todos os partidos socialistas de España», y los del BNG: «Estamos aquí 12.000, 13.000 ou 14.000 persoas, xa non sei. Pero se fosemos o Bloque estaríamos 150.000, e segundo eles sodes todos ricos e ninguén ten que traballar».

Pero evitó ir más allá. «Sei que vou ser insultado. Pero nós non somos como eles. A xente está esperando algo distinto, e eu quero facer unha campaña de ilusión. Moitos decides que temos que dar caña, deixade que a den eles. A caña hai que dala o 18F. Ese vai ser o día da caña», anunció.

«Eu quero presentarme xeito sinxelo, dende a normalidade. Non queremos espectáculos que nos traen doutros sitios en non serven para nada. Somos xente humilde», dijo. Recordó incluso que nadie tiene «a verdade absoluta», y tendió la mano a los votantes de sus oponentes: «Gobernaremos tamén para eles, dende o primeiro día. Gobernaremos para todos os galegos», afirmó.

Su plan de campaña es «decir a todo o mundo» que la unidad, el respeto, el sentidiño, la humildad, «tan pouco de moda», y el esfuerzo funcionan. Vinculó esas virtudes a su modelo de país, una «Galicia que funciona», concluyó recordando su lema electoral.

Según la organización asistieron 14.000 personas. En la plaza hay 7.800 localidades, pero se llenó la arena y quedó gente en el exterior. Tal afluencia requirió un esfuerzo de organización, y unos 200 autobuses llegados desde Ribadeo, O Barco y Ortigueira, las localidades más alejadas de Pontevedra, señaló la número 3 por la provincia, María Martínez. Y también nervios. «Ay por Dios, por Dios, que salga todo bien», decía una de las organizadoras cerca de las tres de la tarde, cuando aún se probaba el sonido.