Una alerta ciudadana en Arzúa desemboca en la detención de 10 hombres por robos de cable telefónico en toda el área de Santiago

La Voz SANTIAGO

ARZÚA

GUARDIA CIVIL

Son los presuntos autores de 16 delitos que causaron 350.000 euros en daños; la Guardia Civil recuperó 5.200 kilos de cobre

08 may 2024 . Actualizado a las 11:19 h.

El equipo Roca de Santiago, en colaboración con diversas unidades de la Guardia Civil de la compañía de Santiago, detuvo a diez hombres como presuntos autores de 13 delitos de robo de cable telefónico, uno de estragos, uno de pertencia a grupo criminal y otro de apropiación indebida, en la operación Copperberry. Fue iniciada por un robo de cable telefónico en Noia el pasado 9 de enero, y en la investigación los componentes del equipo Roca averiguaron que los presuntos autores formaban un grupo criminal itinerante especializado en la sustracción de tendido telefónico en el rural de toda España.

El grupo estaba perfectamente estructurado y jerarquizado, dividiéndose en células para perpetrar sus acciones, desplazándose en vehículos de alquiler para entorpecer la labor investigadora y su localización. Actuaban estudiando la zona y sus posibles vías de escape, y tras la planificación, al anochecer se desplazaban en una furgoneta al lugar, precedida por un turismo que informaba de posibles controles policiales. Una vez en el punto, cortaban los cables del tendido en trozos de 1,60 metros y los introducían en los vehículos, para trasladarse a localidades alejadas: quemaban el material sustraído en zonas aisladas para deshacerse del recubrimiento y quedarse con la parte metálica, que luego vendían en chatarrerías de Portugal.

Gracias a la colaboración ciudadana, los agentes localizaron en el municipio de Arzúa una línea telefónica saboteada, hallando las herramientas utilizadas para el corte del tendido y varias pilas de cable ya cortado, apilado en un camino próximo. Tras el hallazgo, la Guardia Civil estableció un dispositivo de vigilancia en la zona, sorprendiendo a cuatro de los integrantes de la banada cuando se disponían a recoger parte del cable preparado para su transporte. Una vez detenidos, se localizaron en su turismo secciones de cable, herramientas, guantes e indumentaria para la comisión de los robos.

El trabajo de campo realizado permitió a los guardias civiles la identificación plena de los componentes del grupo criminal, la mayor parte de ellos conocidos de las fuerzas de seguridad por diversidad de ilícitos. Localizaron varios puntos utilizados para la quema del cable, sorprendido en uno de estos campamentos itinerantes a otros cuatro miembros del grupo en plena actividad de quemado, procediendo a su detención. Una vez conocida la identidad de los presuntos integrantes del grupo, la Guardia Civil procedió a la detención de los dos integrantes que permanecían en libertad. A las diez personas se las considera presuntos autores de 13 delitos de robo, uno de estragos, otro de pertenencia a grupo criminal y uno de aprobación indebida por no devolver uno de los vehículos de alquiler en el plazo establecido, esclareciendo los delitos de robo de tendido telefónico realizados en Ames, Rois, Negreira, Boimorto, Arzua, Frades, Val do Dubra, Trazo, Noia y Muros.

Una vez detenidos los presuntos autores, la Guardia Civil centró sus esfuerzos en la localización de los puntos de venta del material sustraído, logrando gracias a la colaboración del Centro de Cooperación Aduanera de Tui acreditar su venta en chatarrerías de Portugal. El instituto armado mantiene la operación abierta, no descartando la posible implicación de los detenidos en ilícitos de la misma índole en otras provincias gallegas.