Detuvieron a cinco personas y fueron intervenidos 21.990 euros en metálico, así como más de 5.600 efectos entre bolsos, carteras, gorras y elementos distintivos de al menos trece marcas
Rebeca y Francisco García fueron localizados en Madrid gracias a una denuncia anónima. Su «modus operandi», enviar cientos de mensajes a sus víctimas, esperarles a la salida de sus casas o enviarles regalos al trabajo. También se les acusa de delitos de pornografía infantil
«Los profesionales detectan, los protocolos funcionan y la colaboración dio sus frutos», dice la consejera de Bienestar, que señala que fue un día antes de la denuncia, el 18 de enero, cuando fue informada de la posibilidad de que una menor pudiera haber sido «inducida a la prostitución»