En el tercer partido de Antón Permuy se vio un equipo con más equilibrio en la ecuación defensa y ataque
07 abr 2024 . Actualizado a las 20:31 h.Antón Permuy recibió una herencia difícil de gestionar, y más todavía tras la goleada de su estreno en el campo del Cayón. Pero el joven entrenador de la cantera, que ya estaba también en el cuadro técnico de Míchel Alonso, poco a poco va dejando su impronta. Y, por lo visto ante el Guijuelo, y en el derbi de O Vao, está haciendo de la consistencia sin balón un punto de partida.
Los resultados tienden a distorsionar el análisis y si Davo hubiese acertado en los compases iniciales, tras un saque de banda visitante regalado, quizás el partido hubiese sido otro y estas líneas también.
Sea como fuere, lo que se vio fue un Compos más compacto, más agrupado en campo propio, pero no remiso a la hora de buscar la portería contraria. El equipo trabajó a fondo para que el Coruxo, un rival al que le gusta tener el balón, no pudiese maniobrar con comodidad a fin de encontrar espacios. La mayoría de las tarjetas amarillas vistas por los jugadores del Compos responden a acciones en las que supieron elegir a tiempo para evitar que las jugadas se envenenasen, aunque fuese a costa de la penalización.
Los problemas físicos en defensa, sobre todo en el sector izquierdo, obligaron al técnico a armar una línea de cobertura atípica, con Antón de Vicente como tercer central y Jaime Santos más pegado al costado zurdo. Los zagueros hicieron un buen trabajo.
En ataque el Compos no fue un equipo que asediase, pero sí tuvo sus opciones. Kike no marcó porque un Borja Marchante sacó sobre la línea un cabezazo tras un centro lateral, a balón parado. Y más tarde, porque el portero se estiró para enviar a córner. A David Grande le faltó velocidad de reacción para coger un rechace y, tras un gran control a pase de Kike, se vio taponado por la rápida reacción de la zaga local. En la segunda parte, Alberto neutralizó con una pierna, en una acción de reflejos, un remate cruzado de Manu Barreiro.
El Compos pudo marcar. Lo mismo que el Coruxo. Pero, respecto a otras veces, salió ganando en el equilibrio defensa-ataque.