Los inspectores detectan un aumento de incidentes en centros educativos
03 may 2024 . Actualizado a las 05:00 h.La inteligencia artificial protagoniza buena parte del congreso que la Asociación de Inspectores de Educación de Galicia (AIEG) está celebrando en Ourense sobre los nuevos retos de su labor profesional. El programa incluye charlas sobre el potencial de esta herramienta tecnológica para mejorar la productividad en las funciones de la inspección educativa y también sobre las oportunidades pedagógicas y los riesgos de su aplicación educativa. Marcos Fernández, presidente del colectivo, explica que la elección de este tema para el congreso responde a la necesidad de formación del cuerpo de inspectores para no descolgarse de la realidad. «Todo lo que llega a la sociedad entra en los centros educativos a la vez. La inteligencia artificial está ya en los colegios y nuestra obligación es adquirir conocimientos sobre todo aquello que creemos va a tener trascendencia», asevera.
Sobre el rechazo que precisamente está surgiendo en sectores vinculados a la educación por la utilización de esta tecnología en las aulas, Fernández insiste en que la obligación profesional del colectivo es estar al día. «Luego podremos entrar a valorar sobre el uso, pero lo primero que tenemos que hacer es formarnos. Eso implica que alguien nos explique cómo surge esto de la IA, en qué momento está, cuál es la legislación, sus usos, y sus posibles beneficios y peligros para tener toda la información. Es una realidad que ya tenemos en los centros y eso se puede constatar», recalca. De hecho uno de los datos aportados en la primera jornada de este congreso es que el 66 % de los alumnos de secundaria en Europa utilizan herramientas de inteligencia artificial generativa.
Pero esta no es la única cuestión vinculada con las nuevas tecnologías que abordó la reunión organizada desde esta asociación que aglutina a 62 de los 95 inspectores que tiene el sistema gallego. También se habló de ciberseguridad y de los problemas de convivencia que, según aseguran desde este colectivo, cada vez están más presentes en las peticiones de intervención que reciben desde los centros educativos. «Es una preocupación que va en aumento entre los docentes, quizá porque ahora se abordan más estos problemas y los procesos son más transparentes», valora el presidente de AIEG. Apunta que los datos de intervenciones que manejan en Galicia dejan esos problemas de convivencia escolar muy limitados a la relación entre iguales. «Los incidentes entre alumnado y docente son muy residuales», asegura Marcos Fernández.
Al margen de que exista una mayor sensibilidad y visibilización de los casos, en la asociación no niegan que los incidentes estén creciendo. «Lo que ocurre con la convivencia en los centros es un reflejo de lo que pasa en la sociedad. Además, ahora las relaciones entre alumnos infantiles y adolescentes son más complejas por todo lo que tiene que ver con el uso de las nuevas tecnologías y las redes sociales», dice Fernández. El presidente de esta asociación de inspectores opina que el agresor utiliza con mayor desinhibición las herramientas digitales para el insulto o el acoso «que si tiene que encararse físicamente con la persona».