Un conflicto energético dispara la tensión fronteriza entre Argentina y Paraguay

Cecilia Valdez BUENOS AIRES / E. LA VOZ

INTERNACIONAL

Central de Yacyretá, en Argentina
Central de Yacyretá, en Argentina Efe

El diputado paraguayo Rubén Rubín habla incluso de la posibilidad de un conflicto bélico

29 sep 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

El conflicto energético entre Argentina y Paraguay no parece encontrar solución. La disputa geopolítica entre ambos países no ha hecho más que escalar esta última semana. Lo que hay de fondo es el cobro de un peaje de la hidrovía que Paraguay le reclama a Argentina y que provocó que el gobierno paraguayo resolviera dejar de transferir energía de la central hidroeléctrica de Yacyretá a la Argentina. El conflicto geopolítico alcanzó su pico máximo cuando el diputado paraguayo Rubén Rubín habló de ir a la guerra con Argentina.

Desde Argentina señalaron que el conflicto tiene razones económicas y políticas. Respecto a la deuda en materia energética, sostuvieron que Argentina le debe a Paraguay 93 millones de dólares por saldos impagos entre 2022 y 2023, pero aseguraron que lo único que está vencido es la parte de 2022, que es un saldo de 36 millones. Desde el gobierno argentino aseguran, además, que en la historia de acuerdos por energía entre ambos países llegó a haber impagos de hasta 390 millones de dólares, y nunca se cancelaron los envíos. Por eso se sospecha que detrás de esta decisión hay razones políticas que tienen que ver con minar la campaña política de Sergio Massa (ministro de economía y actual candidato a presidente del oficialismo), y apuntan a la cercana relación entre el ex presidente argentino Mauricio Macri y el ex presidente paraguayo Horacio Cartés. Santiago Peña, el flamante presidente de Paraguay, es conocido como el delfín de Cartés.

Desde hace un año, Argentina cobra un peaje por la circulación del comercio internacional en la Hidrovía, y Paraguay sostiene que debe dejar de cobrarse. Massa visitó Asunción en agosto pasado y desde el entorno del paraguayo afirman que en esa ocasión le prometió a Peña que suspendería el cobro, pero no cumplió; algo que desde el entorno de Massa desmienten. La estrategia del gobierno argentino será resolver ambos asuntos por separado, pero a pesar de las intensas negociaciones la tensión sigue en aumento. En las últimas horas Asunción sumó una nueva denuncia por la retención de camiones con gas licuado de petróleo (GLP) desde Argentina, y la amenaza de recurrir a un tribunal internacional.