Aspas, ante la frontera del gol

X. R. C. VIGO / LA VOZ

GRADA DE RÍO

M.MORALEJO

En dos ocasiones, el gol se le resistió a Iago hasta la octava jornada y hoy tiene la obligación de estrenarse para no prolongar la sequía en una cita clave en Las Palmas

01 oct 2023 . Actualizado a las 08:42 h.

Nunca en su historia en Primera División con la camiseta celeste tuvo Iago Aspas que esperar hasta la novena jornada para celebrar un gol. Lo hizo en dos ocasiones en la octava fecha y esta noche tendrá la oportunidad de repetirlo en el estadio de Gran Canaria, uno de los dos feudos en donde marcó al octavo intento, el otro fue Balaídos en la 19/20 en un duelo ante el Athletic.

El curso pasado, a estas alturas, Iago era el máximo goleador del Celta con cinco dianas y fue capaz de igualar un registro de los años 50 que estaba en manos de Pahiño. Pero esta temporada, todo ha jugado en su contra pese a que la espalda le ha dado una tregua. El hándicap principal es que el moañés juega más retrasado, centrándose más en la faceta constructiva, y aunque tuvo ocasiones claras para estrenarse, no fue capaz de concretar ninguna de sus oportunidades. Tampoco pudo abrir la cuenta desde los once metros al no haber penaltis a favor y, como consecuencia, ninguno de los siete goles celestes llevan su firma.

La última vez que el capitán tuvo que esperar hasta la octava jornada para marcar fue en el curso 19/20, con Fran Escribá en el banquillo y con el Celta protagonizando uno de sus ya clásicos malos inicios. En la octava fecha, los vigueses recibieron al Athletic y se dieron un respiro clasificatorio con un gol de Iago.

La vez anterior, en octubre del 2017, en donde el tanto se demoró tanto fue en el mismo recinto que esta noche pisará el moañés. Por aquel entonces, el técnico era Juan Carlos Unzué y el 10 no jugaba como delantero, sino que partía desde el costado derecho, ya que Maxi Gómez era el nueve. El charrúa había sido baja para aquel partido, el técnico navarro colocó a Iago Aspas como nueve de referencia y la respuesta fue un hat trick con un gol en la primera mitad y dos más en la continuación para un 2-5 final. De aquel partido han pasado cinco años, con un viaje de los insulares a Segunda y con el céltico convertido en uno de los referentes de la liga.

Esta noche, el moañés vuelve al mismo recinto con el doble reto de conducir a su equipo a un segundo triunfo que le dé un poco de oxígeno y le permita seguir fuera del descenso y marcar para no ver ampliada su frontera con el gol. «En el área contraria, muchas veces es la precisión, el talento y la calidad, y jugadores como Iago lo tienen», dice Rafa Benítez, que elogia al capitán de su nave cabeza vez que tiene ocasión. Por confianza no queda.