El campanu se resistió a picar en el concurso de Río Ulla

Javier Benito
j. benito A ESTRADA / LA VOZ

DEZA

Miguel souto

Ningún salmón se dejó ver en los cuatro cotos de A Estrada

13 may 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

Por segundo año consecutivo el concurso internacional de pesca organizado en A Estrada por la sociedad Río Ulla se cerró sin ninguna captura. El campanu se hace de rogar una temporada más en los cuatro cotos salmoneros de Ximonde, Pontevea, Santeles y Sinde. Mientras, en el de Couso había competición de pesca pero sin muerte. Si la primera jornada en Ximonde algún aficionado creyó atisbar la posible presencia de un ejemplar en las caudalosas aguas, ayer ni siquiera hubo un amago de avistamiento.

Este domingo las condiciones auguraban alguna opción más, tras un sábado con demasiado calor y un caudal muy elevado en el Ulla. Las temperaturas bajaron, con cielos nublados, en especial en las primeras horas. Se sumaba además una bajada de entre dos y tres centímetros del nivel del agua. Algunos pensarán que apenas debe resultar significativa esa medida, pero se nota bastante y favorece en principio para que los salmones se dejen ver en su remontada hacia en el mar. Así lo apuntaba ayer el pescador y responsable de la web especializada Ás orillas do Ulla, Salvador Ortega.

El río seguía pese a esa bajada con demasiada agua y ningún pez rey quiso dejar constancia de su presencia. Los 48 pescadores inscritos en el concurso internacional veían cómo pasaban las horas sin que picase el ansiado campanu de esta campaña. Una edición del concurso, la cuadragésimo octava, donde había un cupo máximo de cuatro ejemplares. En toda la temporada la Xunta autoriza en el Ulla la pesca de un tope de quince, frente a los treinta del 2023, lo que demuestra que cada vez hay menos presencia del pez rey en este cauce a su paso por A Estrada.

En los últimos cinco años tan solo hubo una captura en el concurso, alzándose ganador José Antonio Gallego en el 2022. En esta ocasión no hubo fortuna por ese elevado caudal que obliga a los aficionados a emplear artilugios de pesca más pesados, para lograr lanzamientos más lejanos y llegar más al fondo del cauce. Pero requiere más fortaleza en una nómina muy veterana, que se cansa con más rapidez.