Nadal, Alcaraz y Djokovic jugarán una exhibición en Arabia Saudí

Enric Gardiner COLPISA

DEPORTES

Rafa Nadal, con el ministro de Deportes, el Príncipe Abdulaziz bin Turki Al Saud, y la presidenta de la Federación de Tenis de Arabia Saudí, Arij Mutabagani.
Rafa Nadal, con el ministro de Deportes, el Príncipe Abdulaziz bin Turki Al Saud, y la presidenta de la Federación de Tenis de Arabia Saudí, Arij Mutabagani. JORGE FERRARI | EUROPAPRESS

El balear y el murciano completan un grupo de seis tenistas que componen el Six Kings Slam, un torneo que se jugará en octubre

06 feb 2024 . Actualizado a las 19:08 h.

El desembarco de Arabia Saudí en el tenis es más que una realidad. A la celebración de las Next Gen Finals —el torneo entre los ocho mejores sub-21 del circuito— y el próximo anuncio de que albergarán las Finales WTA se unió este martes el Six Kings Slam, un torneo de exhibición que se jugará en octubre y que reunirá a seis de los mejores del mundo.

Rafa Nadal, Carlos Alcaraz, Novak Djokovic, Daniil Medvedev, Jannik Sinner y Holger Rune completarán una plantilla de lujo, con 50 Grand Slams entre todos. Solo Rune no sabe lo que es levantar un grande, después de que Sinner lo consiguiera hace escasos días en el Abierto de Australia.

Para Nadal, será su primer acto después de que en enero comunicara que se ha convertido en embajador del país. El de Manacor nunca ha jugado en Arabia Saudí. «Después de que otros lo hayan hecho, tengo muchas ganas de jugar por primera vez en Arabia Saudí», explicó el español en un comunicado.

En el caso de Alcaraz, el murciano ya jugó el pasado mes de diciembre una exhibición en Riad, misma sede de este torneo, en la que derrotó a Djokovic. «Me alegra mucho volver a Riad y tener la oportunidad de mostrar mi mejor juego», apostilló el español.

El torneo, que no repartirá puntos ATP por su carácter de exhibición, tendrá lugar en octubre, un mes que cuenta con dos Masters 1.000, el de Shanghái (del 2 al 13 de octubre) y el de París-Bercy (del 28 de octubre al 3 de noviembre), además de dos ATP 500 como Viena y Basilea, del 21 al 27 de octubre.

Polémica

La entrada de Arabia Saudí en el tenis no ha estado exenta de polémica debido al poco respeto por los derechos humanos en un país en el que la homosexualidad es ilegal. Esto ha provocado que tenistas como la rusa Daria Kasatkina, que se declaró homosexual el año pasado, hayan puesto en duda la decisión de los máximos organismos del tenis de llevar el deporte allí. Además, hace unos días, Martina Navratilova y Chris Evert, ganadoras de 18 Grand Slams cada una, criticaron a la WTA por permitir la expansión a Arabia Saudí.

«No es solo que en este país las mujeres no sean vistas como iguales; es un país en el que existe una ley por la que la mujer es propiedad del hombre. Un país que criminaliza la comunidad LGBTQ hasta el punto de condenas a muerte. Un país cuyo registro de los derechos humanos y libertades básicas ha sido objeto de preocupación internacional durante décadas», dijeron las dos tenistas en una columna en el Washington Post.

El país, a través de la princesa Reema bint Bandar al-Saud, miembro del comité olímpico de Arabia Saudí, respondió que Navratilova y Evert le habían «dado la espalda» a las mujeres por las que lucharon en su día y que sus opiniones están basadas en «estereotipos anticuados».

Arabia Saudí se ha dedicado en los últimos años a expandir sus inversiones en diferentes ámbitos, incluido el deporte, donde poseen un Gran Premio de Fórmula 1, el circuito LIV del golf, el circuito de pádel, además de organizar asiduamente veladas de boxeo. En el fútbol, en el pasado mercado veraniego invirtieron cerca de 1.000 millones de euros para atraer jugadores, además de haberse asegurado ya la organización del Mundial de 2030.