La Corte de la Cámara de Comercio de París da la razón al fondo emiratí Mudabala, después de haber roto el contrato firmado con Florentino Pérez
13 may 2023 . Actualizado a las 18:40 h.Nuevo revés judicial para Florentino Pérez y el Real Madrid. La Corte de Arbitraje de la Cámara de Comercio de París se ha pronunciado en contra del club blanco en el litigio que mantenía con Mudabala -el fondo emiratí que absorbió a la petrolera IPIC, propiedad de Cepsa- por un contrato de patrocinio del estadio Santiago Bernabéu de cuatrocientos millones de euros.
Según recoge el diario económico Cinco Días, «el club blanco, presidido por Florentino Pérez, llevó en el 2018 al fondo de propiedad del gobierno de los Emiratos Árabes Unidos ante la Corte de Arbitraje de la Cámara de Comercio de París, después de que este rompiera a finales del 2017 el contrato tras una modificación del primer proyecto».
El Real Madrid había firmado con IPIC -antes de su absorción- un contrato de cuatrocientos millones de euros para invertir en la remodelación del estadio y que, una vez finalizada la obra, tuviera derecho preferente para, de acuerdo a unas condiciones determinadas, darle nombre al campo durante 20 años, así como para patrocinar al club de fútbol durante tres.
La reforma del Bernabéu sufrió un duro varapalo en el 2015 cuando el Tribunal Superior de Justicia de Madrid anuló la modificación puntual del Plan de Ordenación Urbana de Madrid, lo que obligó al club a modificar el proyecto. Este cambio fue el que esgrimió el entonces socio de la entidad que dirige Florentino Pérez para salirse de la operación.
Siempre según el citado diario, «la resolución considera que el contrato expiró en sus propios términos el 30 de junio del 2017, ya que las obras permitidas finalmente eran distintas a las previstas inicialmente. Ello significaba que, como consecuencia de su anulación en el 2015, el 24 de junio del 2017, fecha límite en la que se debían cumplir las condiciones suspensivas, el Real Madrid no estaba en disposición de iniciar las obras que se habían acordado en el contrato de patrocinio».
Además, el tribunal de arbitraje sostiene que el Real Madrid no llegó a pedir el consentimiento de la petrolera para modificar un proyecto que redujo en más de doce mil metros cuadrado el terreno destinado a uso comercial y en treinta mil la edificabilidad.