Dos castellanoleoneses revisitan a Lorca en Tui

Gala Dacosta Diehl

CULTURA

Cedida

El dúo Dulzaro hibrida distintas artes en un homenaje al poeta granadino

07 ago 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

El XVI Festival de Música, Patrimonio e Creación Catedral de Tui cerrará hoy a las 20.45 horas con la actuación de Dulzaro, el dúo vallisoletano que reinventa la música de Castilla fusionada con loops y sintetizadores.

El último concierto del festival tendrá lugar en el claustro de la catedral, donde el cantante Alberto Domínguez y el percusionista Héctor Varela estarán acompañados por el cuarteto de cuerda compuesto por Vania Collazo, Pablo Puga, Lia Vilas y Elisa Ingelmo.

«Un concierto tan especial merecía arreglos especiales», explica el vocalista Alberto Domínguez. Por eso, en este espectáculo que más que un concierto es una hibridación de distintas artes escénicas, el grupo castellano revisita la obra de Federico García Lorca con más músicos sobre el escenario de los que suelen acompañarlos.

Baiuca, Tanxugueiras, Davide Salgado o Rodrigo Cuevas son artistas de Galicia y Asturias que están cosechando un gran éxito mientras ponen en valor la música tradicional. Dulzaro propone algo semejante con la música castellanoleonesa. Para Domínguez es un honor actuar en la ciudad fronteriza con Portugal: «Lo que tenéis en Galicia es un patrimonio riquísimo que sabéis valorar. Ayer mismo actuamos en el Sacra Festival y un niño estaba tocando la pandereta. En Castilla hay muchos prejuicios aún sobre la música tradicional, y aquí todo lo contrario, la celebráis y la apreciáis», explica con auténtica admiración. Desea lo mismo para Castilla y León, donde no es por el momento tan común valorar el patrimonio musical.

Dulzaro encaja muy bien en un evento como el de la catedral de Tui, donde a lo largo de esta semana actuaron Caamaño&Ameixeiras; Samuel Diz; João Frade y Jõao Silva; Jonatan Alvarado y Ariel Abramovich. En esta ocasión, los músicos homenajean a Lorca, a quien tienen en alta estima, y musican obras suyas como Yerma, Poeta en Nueva York o El romancero gitano fusionado con Joaquín Díaz, músico aclamado de su tierra que también puso todo su empeño (ahora está retirado) en sacar a relucir el patrimonio artístico de la comunidad autónoma.

Este nada usual proyecto nació gracias a una beca de la Sociedad General de Autores que le permitió a Domínguez indagar en la obra y la figura de Lorca y adaptar su poesía a ritmos de jota, flamenco y también algo de electrónica.

«La electrónica y el flamenco comparten oscuridad», explica. El dolor y el desgarro de Yerma pueden escucharse a través de los sintetizadores y de los recursos que emplean sobre el escenario, como sonidos reales de caballos o perros, que para el poeta granadino significaban el presagio de la muerte. Todo esto convierte el espectáculo de Varela y Domínguez en algo más que un concierto