Lo que iba a ser un día de relax en un thalasso para celebrar el Día Mundial de la Mujer el 8M, se convirtió en una tediosa jornada de promoción comercial para unas mujeres de Ribadeo que se apuntaron a una excursión a un balneario, excelente y con buenas instalaciones de aguas termales, el de Cuntis. Porque una vez en el balneario fueron obligadas a asistir a un acto puramente comercial.
El Ayuntamiento de Ribadeo, que organizó la excursión, dice que también se sintió engañado a su vez por la empresa organizadora, según explicó la concejala de Servicios Sociales en la última sesión plenaria. Porque el asunto llegó a pleno ante las quejas de las mujeres recogidas por el BNG. Curioso, a veces, cómo se pueden enrevesar o torcer las cosas, incluso una sencilla jornada de relax en un balneario.
Pasar parte de la jornada en una operación comercial y además por obligación no le gusta a nadie y menos después de viajar de Ribadeo a Pontevedra (Cuntis). Puede que el ayuntamiento fuese engañado, como dice la concejala, y lo lamente, seguro, si fue así. No quita una mejor planificación de un viaje, además en una fecha señalada como el 8M, que da pie luego a meter el dedo en la herida una y otra vez. Cada 8M.